
La académica se sumó a la preocupación que varios profesionales y vecinos valdivianos que denuncian un nuevo atentado al patrimonio arquitectónico local al perderse un edificio de 122 años con la intención de construir un nuevo recinto educacional para albergar más estudiantes, aminorar costos de mantención y riesgos.
Barría supuso que la causa del error al demoler el edificio se debe a una no concordancia entre el colegio y el arquitecto, precisando que la nueva construcción dista mucho de ser moderna o de incorporar sustentabilidad en el proyecto. “En un situación como la del colegio se debería haber hecho todo lo posible por rescatar algo y la arquitectura que venga después acomodarse a lo que ya estaba”, dijo.
DESPROTECCION E IGNORANCIA
La arquitecta agregó que lamentablemente no existe vuelta atrás para salvar algo de la edificación, ya que el proyecto está listo y parte del trabajo está avanzado, por lo que sólo se puede educar a las personas para que situaciones como esta no vuelvan a ocurrir.
La académica sostuvo que la desprotección del patrimonio pasa por la ignorancia de las autoridades y la falta de recursos estatales y gubernamentales que apunten a proteger estos lugares, como es el caso de las construcciones Prochelle que están apunto de desmoronarse sin que nadie haga nada.
Para Tirsa Barría, la demolición del tradicional edificio se suma el caso del Mall, el supermercado Único o la demolición del Hotel Pedro de Valdivia, lugares que se han visto cambiados en su fachada afectando irremediablemente patrimonio arquitectónico.“Es lamentable, porque ya que la ciudad se construye con la historia y la memoria, representada en este tipo de edificaciones” aseguró.
Por su parte, la directora del establecimiento, Ximena Bustamante, se negó a hablar sobre el tema puntual de la demolición del edificio del Instituto Inmaculada Concepción, ya que lo consideró un tema pasado que ha tenido “mucha cobertura”.
Publicada el miércoles, 15 de noviembre de 2006